
¡Y se pone más fea!

Aún no nos mojamos, así que seguimos adelante. Dejamos atrás con pena el paso de Tacheras...

...y nos acercamos al refugio del mismo nombre. Al frente, parece que el día quiere cambiar...

...pero esto es lo que se nos viene encima desde el sur. Los Alanos van desapareciendo entre nubes negras.

Seguimos camino adelante, bajo la Sierra de Quimboa

Vista atrás; Peña Ezcaurre parece que libra. ¿Nos habremos equivocado de dirección?

Avanzamos hacia el collado de Petraficha, donde pensamos dar por terminada la excursión y dar la vuelta.
Mostrando una vez más mi proverbial habilidad...

Acercándonos al collado, nos cruzamos con una familia de sarrios; corretean cerca de nosotros y nos dejan acercarnos.

Casi sin darnos cuenta, tratando de fotografiar de cerca a los sarrios, hemos abandonado el GR-11 y nos hemos desviado hacia Petraficha. Pues ya que estamos...

Cae alguna gota de agua, pero ya está ahí la cima...

y... ¡esta

Pasando con un poquito de cuidado...

De regreso, paramos a comer algo en lo que queda del refugio de Tacheras; viene bien para resguardarse del fuerte viento.

¡Qué cabrón! :)

Con la tontería han sido 6 horas de caminata y unos 900 m. de desnivel. Carlos se descojona de mi porque dice que tengo cara de dolorido...

¡y no le falta razón!
De camino a Ansó pillamos un atascazo de impresión

Y fin de la historia; otra vez más hemos tenido suerte con el tiempo en nuestra escapada otoñal, que esperamos poder repetir muchos años. Y es que si no, ¡no hay quien aguante hasta Navidad!




