Me interesaba este pico especialmente porque desde él tendríamos a nuestro alrededor y a la vista a todos los grandes del Pirineo. Como el día fué bastante clarito y soleado, pudimos completar el objetivo de verlos a todos.
Es otro de esos miradores que me gusta encontrar para poder mirar desde la distancia a esos Grandes que todos quieren subir y que, al menos en esta época, suelen estar masificados. Y yo huyo de esa masificación.
El acceso en
Aún así, con un pelín de ayuda (GRACIAS) llegamos hasta los pies del refugio, en donde había un autentico atasco tanto de gente como de coches oo oo oo
Aparcamos el
A los pocos metros de comenzar nuestro camino bajamos para cruzar el rio Cinqueta de Añes Cruces.

Cruzamos una primera arboleda y salimos a un claro, en el cual podemos mirar atrás (la luz del sol a estas horas es muy mala para las fotos :hurt: ) Estamos a la sombra y se camina bastante bién con esta temperatura.

Volvemos a internarnos en el bosque continuando el camino que nos lleva en dirección SE por el barranco de La Ribereta

La ascensión por ahora es muy suave y nos permite ir calentando poco a poco. Este "cartel" nos indica que vamos por el buen camino, hacia el Collado de Eriste.

Superamos la subida por el bosque y salimos a un valle en forma de U realmente precioso.

Sin embargo, no todo es tan bonito, pues al fondo de este valle se acaba lo suave y empieza lo bueno. Hay que subir por la izquierda de ese picacho que se vé en medio de la

Seguimos las marcas del GR hasta el Collado de Eriste, para el cual todavía nos queda un rato. Por suerte, seguimos en la sombra.

Pero la sombra se acaba en cuanto superamos esta subida. Vemos lo que nos queda (o casi todo) hasta el collado.

Nos quitamos ropa y seguimos subiendo (empieza a hacer calor, y todavía nos queda un rato de subida) Una mirada atrás.

Poco antes de llegar al collado encontramos uno de esos extraños neveros que sobreviven durante el verano.

Llegamos al collado y echamos una mirada atrás al camino recorrido

Y otra mirada hacia el otro lado, por donde continua el camino hacia el refugio Angel Orús.

En el Collado de Eriste decidimos dejar las mochilas y subir sin carga la zona que nos separaba de la cima.
Durante la subida, aparece ante nuestros ojos el Ibón de Llardaneta

Poco a poco llegamos a un collado que separa ambas cimas y atacamos primero a la cima SE siguiendo los pasos (poco claros) de un grupo de 3 personas que iban también a por esa cima.
Llegamos a la cima, les hacemos las fotos y les pedimos que nos hagan una.
Si

Desde ahí hacemos algunas fotos pero enseguida nos vamos a por la otra cima (que ya habían hecho los otros) y llegamos más facilmente que a la primera, es más sencillo.
Si

Vamos con las fotos de los alrededores. A ver cuantas cimas reconoceis (solo la más importante, claro)

Pues sí el Posets. ¿Y en esta otra qué se vé?

Las tres Sorores tirando de zoom. Siguiente...

Perdiguero!!! ¿Y ahora (las del centro repetidas, pero ¿y a la derecha?)

Vignemale, efectivamente. Pero falta una...

Siiiii, Aneto y alrededores!!!
En la siguiente vemos a Lady Muchosueño que nos saluda desde la cima del Forqueta con la cima del Forqueta SE al fondo

Después de disfrutar en soledad de la cima, al cabo de un rato decidimos bajar. Se hace por la parte izquierda de esta

Una vez en el collado, recogimos las mochilas y.. para abajo!!

Bajando, nos encontramos de frente con esta bonita estampa de un conocido.

El Gran Bachimala!!
Y unos pasos más adelante aparece esta panorámica ante nuestros ojos. claro, a la subida la teníamos a la espalda....

No podemos dejar de admirarlo... Quita, bicho!!!

¿Quién me ha sacado esa

Una vez terminadas estas duras rampas decidimos pararnos a la sombra de los árboles a comer con estas preciosas vistas.

Pero la ruta no terminaba ahí, quedaba atravesar el bosque...

...y llegar a Viados, en donde habíamos aparcado el

Os dejo el mapa de la zona. He marcado con puntitos azules el recorrido que hemos hecho.

Y esto fue todo. Esperamos que hayan disfrutado con nuestra narración de los hechos en esta ruta montañera y les hayamos dejado un buén sabor de boca.
Les dejo con una







