
Un montañero de 38 años, identificado como P. D., natural de Valencia, murió ayer al caer por una pendiente de un importante desnivel en el Pico Curavacas, según informaron a este periódico fuentes de la Guardia Civil y de la Junta de Castilla y León.
Dichas fuentes precisaron que la llamada de socorro que advertía de la desaparición del montañero se recibió sobre las 15,43 horas cuando una persona indicó que su compañero de excursión había resbalado por la nieve y caído por un barranco, sin que pudiera oírle ni verle.
El accidente se produjo en el paraje conocido como Callejón Sur de Vidrieros, en la ladera norte del Pico Curavacas. Según las primeras investigaciones, el malogrado montañero cayó por un precipicio de unos 2.000 metros tras sufrir, al parecer, un resbalón.
Activado el helicóptero de la Agencia de Protección Civil e Interior de la Junta de Castilla y León y avisada la Guardia Civil, que envió otro helicóptero, se iniciaron las labores de rescate hasta localizar el cuerpo sin vida del montañero sobre las 17,30 horas.
La Junta de Castilla y León informó de que una vez recuperado el cadáver, y tras ser levantado por orden judicial, fue evacuado en el helicóptero de la Guardia Civil hasta la localidad de Cervera de Pisuerga, concretamente hasta el campo de fútbol de La Bárcena, desde donde fue trasladado hasta el depósito municipal para practicarle en las próximas horas la autopsia. Por lo demás, cabe decir que eran dos los montañeros los que habían iniciado ayer la jornada deportiva. Para ello, se habían trasladado hasta Vidrieros en
AÑO ‘NEGRO’. La accidentalidad en la Montaña Palentina sufrió este año un importante repunte que ha llevado a 2006 a ser un año negro en las cimas de la provincia. Cinco muertes (la última se había registrado el día de la Inmaculada, cuando una mujer francesa, cuyo cuerpo no pudo ser rescatado hasta tres días después, murió al precipitarse por un barranco precisamente en el Pico Curavacas) y 10 personas que requirieron ser evacuadas por el Grupo de Rescate Especialista en Intervención de Montaña de la Guardia Civil, es el balance, por el momento, del año.
Especialmente accidentado fue el mes de marzo, y más concretamente el día 12, cuando en un radio inferior a los 30 kilómetros hubo que efectuar tres rescates en el entorno del Espigüete, con un balance de un muerto en el propio pico, un herido en el Pico Murcia y otra mujer herida de gravedad en Las Lomas. El 16, los especialistas de la Benemérita acudían a evacuar el cuerpo sin vida de otro montañero, hallado en la cara norte del Espigüete, el mismo día que moría a causa de las heridas sufridas la mujer accidentada ese fin de semana.
Tuvieron suerte
El primer accidente del año tuvo lugar en Fuentes Carrionas el 11 de febrero. A partir de entonces se fueron sucediendo las actuaciones de los efectivos del Greim, con otras dos en abril y un saldo de tres evacuaciones en el Callejón Grande del Curavacas. Casi el mismo escenario donde el 8 de junio aparecía en el Cabriles un vallisoletano cuya desaparición fue denunciada el día antes.
El día de San Juan (24 de junio) y el 23 de julio, fue el Espigüete de nuevo el triste protagonista de esta particular crónica negra.
En el primer caso, el herido fue hallado en la cara sur, con la cadera lesionada tras sufrir un desprendimiento de rocas; mientras que el segundo requirió ser evacuado por vía aérea por efectivos de rescate asturianos, al encontrarse los del Greim de León actuando en otro salvamento.
Los expertos siempre han recomendado que se adopten las máximas precauciones cuando los amantes de la montaña tienen intención de hacer de su pasión una jornada que finalmente no se vea truncada por la desgracia. En este sentido, el año 2006 no ha sido precisamente un año bueno desde este punto de vista teniendo en cuenta las circunstancias.
