En el León Dormido... ¡¡ con la Organización !!
Publicado: 02.09.2007 - 11:47
Pues sí, como leéis... ¡¡con los mismísimos!!
Esta mañana he intentado acercarme al San Lorenzo pero, como hacía un día muy feo, me he dado media vuelta y me he ido a la Sierra de Cantabria, que parecía más despejada. La Sierra de Cantabria separa la humedad del norte de España de la seca Rioja así que, en buena parte, es la responsable de la calidad de los vinos de esta tierra ss
Hay un pequeño monte que destaca por su curiosa forma en las estribaciones de la Sierra de Cantabria, en la frontera entre Navarra y el País Vasco y muy cerquita de La Rioja. Parece un León Dormido:
Se sube con el hasta el puerto de La Aldea (curioso paso entre dos enormes monolitos), pasado el pueblo de Lapoblación, a 1.000 m. justos de altitud.
Desde ahí, se sube por un precioso bosque de hayas:
La subida por la cara norte es un corto paseo de poco más de media hora (244 m. de desnivel); aún así, tiene algún paso un poco vertiginoso, asegurado con una pequeña sirga y dos clavijas. En la cima hay restos de una vieja construcción (posiblemente un castillo) y otros más modernos, de una antena hoy ya desmontada.
Por su estratégica situación, tan aislada, ofrece una magnífica vista del Sistema Ibérico, del Moncayo al San Lorenzo. Y, dicen (yo no lo he comprobado), que en días claros se alcanzan a ver los Pirineos y los Picos de Europa. Hoy ni siquiera se veían otros montes más cercanos como Gorbea, Anboto... pero no era el mejor día. Eso sí, espectacular la vista de las nubes sobre el Valle del Ebro y las infinitas viñas, con sus uvas ya casi a punto para ser recogidas.
Bueno, el caso es que, una vez arriba, me he encontrado con un señor ya mayor; y, a los pocos minutos, han aparecido dos abueletes, probablemente septuagenarios. La conversación no tenía desperdicio:
- Qué, ¿has subido con "el chaval" -refiriéndose a mi, que debe hacer 25 años que no me llaman chaval-?
- Pues no -responde el primer montañero-, mi hijo está en el Tibet.
- Ah, buen sitio.
- Sí, se marchó la semana pasada con unos amigos a subir el Cho Oyu. Bueno, parte de ellos, porque otros van al Nanga Parbat.
oo oo
Lo que más gracia me hacía era el tono de "ah, el Cho Oyu, ahí es donde voy a comprar el pan todas las mañanas" que utilizaban.
Después de pasar un rato en la cima (1.244 m.) he bajado por la cara norte con los dos abueletes. El primero (que, según me han contado los otros dos, era el Presidente de la Federación Riojana de Montaña) ha vuelto por donde habímos subido. Y, de repente me doy cuenta de con quién estoy tratando... ¡¡la Organización!!: han empezado a balizar el camino de la cara norte con cintas de plástico.
Resulta que estas dos personas colaboran en un club de montaña para jubilados de Vitoria y el martes tienen previsto subir al León Dormido, la primera excursión de esta temporada. Llevan más de 20 años con ello. Hacen excursiones semanales donde llegan a juntar a más de 100 montañeros de "cierta" edad... ¡muchos de ellos tienen más de 80 años! ¡Quién llegara a esa edad con fuerza y ánimo para seguir subiendo montañas!
Bueno, pues he conocido a la Organización. Pero he sentido su maligno influjo: la cámara se ha quedado sin batería antes de empezar y, como habréis supuesto, he tenido que tirar de móvil :wallb:
Esta mañana he intentado acercarme al San Lorenzo pero, como hacía un día muy feo, me he dado media vuelta y me he ido a la Sierra de Cantabria, que parecía más despejada. La Sierra de Cantabria separa la humedad del norte de España de la seca Rioja así que, en buena parte, es la responsable de la calidad de los vinos de esta tierra ss
Hay un pequeño monte que destaca por su curiosa forma en las estribaciones de la Sierra de Cantabria, en la frontera entre Navarra y el País Vasco y muy cerquita de La Rioja. Parece un León Dormido:
Se sube con el hasta el puerto de La Aldea (curioso paso entre dos enormes monolitos), pasado el pueblo de Lapoblación, a 1.000 m. justos de altitud.
Desde ahí, se sube por un precioso bosque de hayas:
La subida por la cara norte es un corto paseo de poco más de media hora (244 m. de desnivel); aún así, tiene algún paso un poco vertiginoso, asegurado con una pequeña sirga y dos clavijas. En la cima hay restos de una vieja construcción (posiblemente un castillo) y otros más modernos, de una antena hoy ya desmontada.
Por su estratégica situación, tan aislada, ofrece una magnífica vista del Sistema Ibérico, del Moncayo al San Lorenzo. Y, dicen (yo no lo he comprobado), que en días claros se alcanzan a ver los Pirineos y los Picos de Europa. Hoy ni siquiera se veían otros montes más cercanos como Gorbea, Anboto... pero no era el mejor día. Eso sí, espectacular la vista de las nubes sobre el Valle del Ebro y las infinitas viñas, con sus uvas ya casi a punto para ser recogidas.
Bueno, el caso es que, una vez arriba, me he encontrado con un señor ya mayor; y, a los pocos minutos, han aparecido dos abueletes, probablemente septuagenarios. La conversación no tenía desperdicio:
- Qué, ¿has subido con "el chaval" -refiriéndose a mi, que debe hacer 25 años que no me llaman chaval-?
- Pues no -responde el primer montañero-, mi hijo está en el Tibet.
- Ah, buen sitio.
- Sí, se marchó la semana pasada con unos amigos a subir el Cho Oyu. Bueno, parte de ellos, porque otros van al Nanga Parbat.
oo oo
Lo que más gracia me hacía era el tono de "ah, el Cho Oyu, ahí es donde voy a comprar el pan todas las mañanas" que utilizaban.
Después de pasar un rato en la cima (1.244 m.) he bajado por la cara norte con los dos abueletes. El primero (que, según me han contado los otros dos, era el Presidente de la Federación Riojana de Montaña) ha vuelto por donde habímos subido. Y, de repente me doy cuenta de con quién estoy tratando... ¡¡la Organización!!: han empezado a balizar el camino de la cara norte con cintas de plástico.
Resulta que estas dos personas colaboran en un club de montaña para jubilados de Vitoria y el martes tienen previsto subir al León Dormido, la primera excursión de esta temporada. Llevan más de 20 años con ello. Hacen excursiones semanales donde llegan a juntar a más de 100 montañeros de "cierta" edad... ¡muchos de ellos tienen más de 80 años! ¡Quién llegara a esa edad con fuerza y ánimo para seguir subiendo montañas!
Bueno, pues he conocido a la Organización. Pero he sentido su maligno influjo: la cámara se ha quedado sin batería antes de empezar y, como habréis supuesto, he tenido que tirar de móvil :wallb: