El camino permite admirar la salida de la garganta de Escuaín, así como la cascada terminal del barranco de Consusa. Desde Escuaín el sendero parte detrás de la fuente, a la entrada del pueblo, entre un viejo transformador y la antigua escuela. Baja hacia el Este, a través de bojes y encinas seculares, con fuerte desnivel para alcanzar la confluencia del barranco de la Fuente, que desciende de Castillo Mayor y el río Yaga. La travesía del río se hace sobre grandes bloques.
El camino propiamente dicho continúa un poco aguas abajo, cruza las ruinas de un molino, une con el que viene por la canalización y evita la última cascada del Yaga, y entre vegetación llega hasta la amplia poza, poco profunda, donde cae la cascada terminal del barranco Consusa. A menudo seco, merece la pena verlo en época de crecida o lluvias. El camino sigue hacia el NE. y en su cruce con el barranco de Bucherbuala, pasa en cornisa por encima de un resalte. Después asciende, con buena pendiente y variada vegetación, a buscar un contrafuerte característico, cuya cuerda sigue hasta la confluencia con la pista de Revilla, a cerca de quince minutos del pueblo, andando.

Desde la pista de Revilla, el desvío está señalizado con un cartel indicador. La pista, más ancha, permite el aparcamiento en uno de sus laterales. Desde el calor de la solana, es agradable bajar al frescor de la garganta. Tener en cuenta tiempos y desniveles. La cuenca del Yaga es, terreno duro y agrestre, que no regala nada.
Horarios: 30 minutos de descenso hasta el Yaga y 45 de ascenso a la pista.
Desniveles: Escuaín (1209 m.), rio Yaga (950 m.), Revilla (1220 m.)